Lugares en los que quizá te gustaría estar (XIII): CN Tower, el edificio más alto de América


Las ciudades hay que verlas desde todos los puntos de vista y uno de los que más nos gusta son las alturas. Hay veces que eso conlleva muchas escaleras o largas colas que acaban desaconsejando la visita, pero si se cruza en nuestro camino la posibilidad, solemos aprovecharla. Hoy os llevamos al edifico más alto del continente americano, y el quinto más alto de todo el mundo. Pese a lo que podáis pensar no está en Estados Unidos, sino en su vecino del norte. La CN Tower de Toronto se ha convertido en todo un símbolo de Canadá. Al mismo tiempo que es visible desde un montón de puntos de la ciudad, por razones obvias, su interior, netamente turístico, permite asomarse a la mayor megalópolis canadiense y divisar, en días despejados, desde la grandeza del lago Ontario hasta la sucesión inacabable de edificios que pueblan el skyline de Toronto. Hay quien dice ver las cataratas del Niágara. A nosotros se nos antoja que eso ya es mucho ver. Aquí van nuestros consejos para visitar la CN Tower.




UN POCO DE HISTORIA

El faraónico proyecto de construcción de la CN Tower arrancó en 1973 y, pese a su complejidad, tardó tan sólo tres años en ejecutarse. Las siglas de este monumento significan “Torre Nacional de Canadá” (Canadian National Tower), lo que refuerza la idea de monumento nacional, aunque hay que decir que también aluden a la Canadian National Railway, la empresa de trenes, que fue quien la construyó. El monolito en cuestión mide 533 metros de alto, más de medio kilómetro, y costó unos 300 millones de dólares canadienses. Cuentan que el dinero se recuperó en unos 15 años. Desde entonces ya es rentable.


La torre se ubica al sur de la ciudad, casi a orillas del lago, en una de las zonas más interesantes de Toronto, junto a la histórica estación de tren de Union Station, lo que hace que en muchas fotos aparezcan las vías. Está pegada a atracciones muy populares como el Acuario o la icónica carpa del Rogers Centre, hogar de los Toronto Blue Jays de beisbol.

DESDE DÓNDE VER LA CN TOWER

Captar una buena fotografía con la torre sobresaliendo entre otros rascacielos no es muy difícil desde lugares relativamente cercanos como el inicio de Yongue Street o Front Street. No obstante la profusión de edificios enormemente altos en Toronto hace que, pese a que haya muchas combinaciones posibles, tampoco la CN Tower esté siempre presente en un itinerario cualquiera. Como lo mejor en estos casos suele ser tomar distancia, nuestra recomendación es que subáis al ferry hacia las Islas de Toronto. Por unos módicos siete dólares canadienses (sólo se paga la ida) tendréis una fantástica perspectiva.



El ferry os puede llevar a Ward’s Island, Centre Island o Hanlan’s Point, donde se ubica el pequeño aeropuerto. La torre es visible desde cualquiera de los tres recorridos, de hecho lo ideal sería ir desde uno y volver desde otro, pero si hay que elegir nuestra recomendación es el ferry de Centre Island. Podréis divisar, no sólo la CN Tower, sino todo el skyline de Toronto.



Sin necesidad de abandonar tierra firme una zona ideal es el Puerto, el llamado Harbourfront, donde los edificios son algo más bajos (aunque bastante más altos que la media de casi cualquier ciudad) y podemos hacernos una idea perfecta de la inmensidad de la torre.



Otro buen sitio es a los pies de la torre. Girad el cuello hasta que este lo permita. La sensación es que la torre se os va a caer encima.

 
CÓMO ENTRAR EN LA CN TOWER

La CN Tower abre todos los días del año excepto el de Navidad, normalmente de 9:00 a 22:30, aunque el horario puede sufrir algún ajuste. La entrada se puede comprar allí mismo y nunca olvidéis que es una atracción turística masiva, lo que significa que es normal que haya colas y la espera puede llegar a ser muy larga (el día que fuimos nosotros había dos horas de cola, que pudimos burlar. Más adelante os contamos cómo). El precio de entrada estándar es de 36 dólares canadienses, lo que da derecho a subir a dos de los tres miradores y a la cafetería que se ubica en uno de ellos. De todas maneras hay muchas combinaciones posibles ya que hay tickets conjuntos para visitar la torre y el acuario y si adquieres la Toronto Pass la visita está incluida, aunque no evita las colas (aquí te contamos cómo funciona la Toronto Pass y otras muchas cosas de Canadá).

 
EL INTERIOR DE LA CN TOWER

La tienda de recuerdos se ubica en los bajos y el ascensor ya es un prodigio de la técnica, porque tarda apenas 58 segundos en subir al Lookout level, o “Piso de observación”, el primero de los miradores, que está a 346 metros. Unos enormes ventanales de cristal te permiten divisar la ciudad.



Recuerda que las vistas son panorámicas. Además de poder caminar por toda la plataforma, esta es giratoria y completa una vuelta cada 72 minutos, por lo que, si así lo deseas, ni siquiera tienes que moverte para divisar toda la ciudad. En este piso está el Horizons Café en el que, si encuentras sitio (buena suerte) puedes pedir la mejor copa con vistas a Toronto. Unido mediante unas cortas escaleras, un poco más abajo también se puede acceder al Glass Floor, o “Piso de vidrio”, otra plataforma, esta no apta para quienes sufren de vértigo, en la que caminas sobre enormes paneles de cristal que simulan dejarte suspendido en el vacío. Una atracción más que se abrió en 1994.


El tercer nivel o mirador es el popular Skypod, para el que hay que pagar un suplemento y coger otro ascensor desde el primero de los niveles. Está a 447 metros de altura. Esa cifra lo convierte en el mirador más alto del mundo. Aquí es donde cuentan que en los días claros se ve Estados Unidos. Nosotros no llegamos a subir. Tiene que ser espectacular, pero tampoco estamos seguros de que haya mucha diferencia entre el mundo visto a 447 metros o a 350.


Además del Skypod, la joya de la corona de esta CN Tower es su restaurante panorámico, el 360 Restaurant en el que se puede almorzar desde las 11:00 de la mañana o cenar desde las 15:30. El precio no es módico, pero está claro que es difícil igualar las vistas. La reserva se hace por internet, cuanto antes mejor. La buena noticia es que, ya que te van a sacar un ojo de la cara, te puedes olvidar de la cola, te suben directamente. En este post ya os hablamos de este y otros muchos lugares para almorzar o cenar en Canadá 



Por si os habéis hecho un lío, la estructura, una vez en el ascensor es la siguiente. El Glass Floor está a 342 metros, el observatorio principal, en el que se ubica el Horizons Café a 346 y el 360 Restaurant a 351. Todo está unido y es accesible con una sola entrada (el restaurante sólo con reserva). Por encima de eso os quedará el Skypod a 447 metros, que hay que pagar aparte. Desde cualquier sitio tendréis unas vistas de Toronto que quitan el hipo.


Si queréis reservar en el restaurante consultad siempre la web, ya que sus días y horarios de admisión no siempre concuerdan con los generales de la CN Tower. Ah, y un último recordatorio. La noche también se disfruta aquí. No os olvidéis vuestra foto nocturna de la torre, que suele iluminarse con los colores de la bandera canadiense, aunque el juego de luces está preparado para lo que sea.


Si vais con tiempo y sois adictos a la adrenalina, podéis comprar el Edgewalk, un emocionante paseo en el que os equiparán con arneses y quedareis suspendidos en el aire por el módico precio de 225 dólares. Está previsto que a mediados de 2018 la CN Tower estrene nuevos miradores y una mayor oferta de comida y bebida en su interior. O lo que es lo mismo, diversión siempre vais a encontrar. Abajo os dejamos el enlace con la web de la CN Tower que hará mucho más fácil la planificación de vuestra visita.






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