Si hay algo por lo que Ávila es mundialmente conocida es,
sin duda alguna, por su muralla. Los abulenses cuentan con orgullo que el suyo
es el recinto amurallado mejor conservado de todo el mundo. Tiene un perímetro
de unos dos kilómetros y medio y buena parte de ese recorrido, 1’5 kilómetros
más o menos, se puede visitar. En la web http://muralladeavila.com/es/
te informan de los horarios, que varían en función de la época del año. La
entrada cuesta 5 euros y se puede acceder a través de varios puntos, la Casa de
las Carnicerías, la Puerta del Alcázar y la Puerta del Puente. Los martes, de
14:00 a 16:00 horas la visita es gratuita.
2.500 almenas y hasta 9 puertas jalonan un recorrido
sensacional. Las vistas desde arriba son fantásticas y conocer algo mejor la
historia de este lugar único no está de más, así que si el tiempo lo permite la
visita es obligada. Pero si por lo que fuera no tienes la oportunidad de subir,
ten en cuenta que la muralla impregna la vida de Ávila, aunque no quieras la
vas a tener delante, así que otra de las opciones es pasear mientras la
rodeamos. En nuestra opinión el Paseo del Rastro es un sitio fantástico para
hacerlo con unas vistas geniales y la calle San Segundo, dónde está la oficina
de turismo y la propia entrada a la muralla, también nos ofrece un muy buen
panorama de la Puerta del Alcázar y la propia Catedral.
2- LA
CATEDRAL
Cuentan que la Catedral de Cristo Salvador fue la primera
gótica que se construyó en toda España, aunque su construcción se ha prolongado
por diferentes etapas, algo que también se deja notar en su arquitectura. A
nosotros la verdad es que el interior nos sorprendió y nos gustó mucho. La
entrada cuesta seis euros y se puede comprar en la web de la Catedral, http://catedralavila.es/ dónde además
podéis encontrar toda la información. También se puede visitar la Torre del
Campanario.
En nuestra opinión la catedral es muy fotogénica, pero al
encontrarse en una plaza que es bastante pequeña, encontrarle el ángulo
adecuado a la fotografía tampoco es tan fácil. Tomaros vuestro tiempo y pasead
sus laterales, merece mucho la pena. La puerta del cercano hotel Palacio de los
Velada puede ayudaros bastante.
En el interior hay mucho que ver. La planta principal
cuenta con un precioso Coro y un magnífico Altar Mayor de principios del siglo
XVI, pero hay mucho más. Consultar la audioguía o ir con la visita planificada
no está de más.
Monumento nacional desde 1949, además de esa planta hay
varias salas interiores, capillas, una Sacristía, la Sala Capitular, la espectacular
Girola, que es la parte más antigua de la Catedral y un delicioso Claustro en
el que el silencio se apodera de todo. Además viene con sorpresa, porque ahí
reposan los restos del ex presidente Adolfo Suárez y su esposa. Los encontraras
bajo una lápida en el suelo en la que se puede leer el emblema “la concordia fue
posible” en alusión al convulso período de la transición.
La estampa de Ávila (foto de portada) es mundialmente conocida y en ella se
incluye su principal símbolo, la muralla, pero ¿desde dónde está tomada? Pues
esta es la respuesta, desde el Mirador de los Cuatro Postes, un lugar
extramuros, pero que dista menos de media hora caminando desde la Catedral. Hay
que salir del recinto y cruzar el río Adaja.
En realidad el mirador es un monumento con columnas,
capiteles y una gran cruz de granito. Tiene su historia porque data del siglo
XVI y sobre él hay multitud de historias y más de una leyenda. Lo cierto es que
más allá de ese valor cultural, para los visitantes este es un punto en el que
divisar la urbe e imaginar que era muy parecida hace ya cientos de años.
Se recomienda la visita al atardecer, para observar el
contraste entre noche y día, porque la muralla de noche está magníficamente
iluminada. Lástima que nosotros no pudiésemos, entre otras cosas por las
gélidas temperaturas.
4- CONVENTO
Y MUSEO DE SANTA TERESA DE JESÚS
De visita obligada para quienes sean religiosos, tampoco
hace falta creer para darse cuenta de la importancia que a esta Santa le otorga
su ciudad natal. La iglesia fue levantada, cuentan, sobre su casa natal y la
verdad es que ofrece una estampa bastante imponente desde el exterior.
Se encuentra en un rincón de la muralla, en una pequeña
plaza en la que se respira calma y paz, excepto si alguna excursión decide
irrumpir en ese momento. En el lateral de la plaza está la Sala de Reliquias y
una pequeña tienda de recuerdos. La verdad es que nuestra parte favorita no
fue. Es una estancia pequeña con un puñado de enseres variopintos como zapatos
e incluso un dedo de la Santa. Nosotros lo dejamos a decisión de cada cual. El
interior de la iglesia sí es más destacable. Aquí tenéis el enlace para conocer
algo más sobre esta Santa
5- LA
PLAZA DEL MERCADO CHICO
Es habitual que la ubicación de los ayuntamientos nos
ofrezca muchas pistas sobre algunos de los lugares más importantes en cada
ciudad. También sucede aquí. El consistorio está ubicado en esta coqueta plaza
que tiene ya diez siglos de historia. Situada en el centro del interior
amurallado, Ávila no es una ciudad grande, pero si algún sitio responde a la
perfección a la definición de “estar a unos pasos” es este, ya que tiene todo
muy cerca. El ayuntamiento abulense es un coqueto edificio isabelino que se
encuentra perfectamente integrado en la arquitectura de la plaza.
Pese a no ser de un gran tamaño la plaza sigue siendo
punto neurálgico del día a día. Se instalan mercadillos y es el lugar elegido
para muchos eventos al aire libre. Durante nuestra visita el despampanante
árbol de navidad aún estaba por desmontar.
En la plaza también encontramos la iglesia de San Juan
Bautista, declarada Monumento Nacional. Es una de las favoritas de la ciudad y
en ella se bautizó a Santa Teresa de Jesús en 1515.
6- BASÍLICA
DE SAN VICENTE
La basílica es, sin duda, uno de los lugares más
destacados extramuros, aunque está a apenas unos metros de la muralla. Tras la
Catedral, este es el templo más grande de Ávila. Fue construido en recuerdo de
Vicente, Sabina y Cristeta, hermanos mártires del siglo IV. Está hecha con la
particular “piedra caleña”, arenisca de un pueblo cercano y como tantísimas
cosas que vemos en Ávila es Monumento Nacional.
Merece la pena fijarse en todos los pequeños detalles.
Cornisas, capiteles y ábsides crean un templo románico estupendo. Cuenta con
una fantástica fachada y la visita interior es muy recomendable. Entrar cuesta
poco más de dos euros e incluye una audioguía muy útil a la hora de tener más
datos. Del interior nos gustó mucho su nave central.
Quizá lo más destacable de ese interior sea el cenotafio,
un elemento funerario que cuenta con una rica ornamentación y que además está
muy bien conservado. En él se recrean diversas escenas, por ejemplo de la
historia de los Reyes Magos. Y no, aquí no están los restos de los mártires,
que al parecer se encuentran en el altar mayor. La visita es muy tranquila y no
os va a decepcionar. Si queréis saber más siempre podéis consultar la web de la basílica.
7- PLAZA
DE SANTA TERESA DE JESÚS
La Plaza de Santa Teresa de Jesús es también la histórica
Plaza del Mercado Grande. Fuera de la muralla San Vicente es el monumento más
destacado y esta plaza el punto de encuentro más importante. La Plaza cuenta
con una gran actividad comercial que se desarrolla en sus soportales. Hay
bares, negocios y mucha vida y además está frente a la Puerta del Alcázar,
probablemente el punto más importante de entrada al recinto amurallado. Eso sí,
los dos lados de la plaza ofrecen contrastes. A un lado la tradición y a otro
la modernidad encarnada en un edificio de Moneo que al parecer no deja de
dividir a los abulenses.
8- PARROQUIA
DE SAN PEDRO APOSTOL
No salgamos aún de esta plaza. Al fondo se encuentra esta
parroquia. A nosotros nos llamó bastante la atención su precioso rosetón. Es,
cómo no, Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural y pese a que no lo
parece su tamaño es bastante importante. En la plaza apenas se camufla tras el
monolito.
Los reyes juraron aquí respetar los fueros de Castilla.
El lugar siempre ha sido importante para la vida en Ávila. Al parecer la
entrada cuesta un euro y medio y decimos al parecer porque no lo sabíamos.
Nosotros simplemente nos asomamos y no vimos ninguna indicación.
9- LA
PUERTA DEL RASTRO
Visitar las diferentes puertas que componen la muralla es
muy recomendable si tenéis el tiempo suficiente. Se trata de lugares que nos
ofrecen una visión privilegiada del entorno. Nuestro sitio favorito, sin duda
alguna, es este. Esta puerta fue todo un descubrimiento. Su belleza se vio acrecentada
por la nieve, que lo teñía todo de blanco. Con la iglesia de Santiago en primer
término, es un sitio perfecto para apaciguar el alma.
Junto a la puerta hay un pequeño parque y una fantástica
vista de la muralla. Tanto con el día soleado como con el día nublado, e
incluso si el frío no lo hace muy deseable, os aseguramos que este es el sitio
en el que sentirse en paz. Y de paso conseguir algunas de las mejores fotos de
vuestro viaje, aunque no haya monumentos en ellas. ¿O sí?
10- PLAZUELA
PEDRO DÁVILA
A apenas unos metros de la Puerta del Rastro está esta
plazuela intramuros que puede que no nos llame mucho la atención. La belleza no
se le puede negar, pero en una ciudad como esta, en la que toda piedra conspira
para crear lugares únicos, este quizá no sea el más destacado. Sin embargo
cuenta con un elemento que la hace única. En el número 8 se alza un restaurante
con una placa en el lateral que llama mucho la atención. Dice la placa que el
popular director de cine Orson Welles vivió aquí durante el rodaje de la
película “Campanadas a Medianoche”. Tanto le gustó que la compró y cuando era
joven hizo varias visitas.
11- EL
ARCHIVO HISTÓRICO PROVINCIAL
El actual Archivo está en un edificio que a lo largo de
la historia ha sido Convento del Carmen e incluso Prisión Provincial.
Encontrarlo no es complicado. Está en la Plaza de Concepción Arenal, junto a la
Puerta del Carmen, otro de los accesos a la zona intramuros, muy cerca del
Parador de Ávila. Decimos que no es difícil de encontrar porque su elemento más
significativo es una señorial espadaña visible desde muchos puntos. Si os
fijáis en vuestras panorámicas tomadas desde Los Cuatro Postes seguro que la
encontráis al momento.
Y si estáis en Ávila y ha nevado, que sepáis que este es
uno de los lugares favoritos de los abulenses para disfrutar de la nieve y
lanzarse en esquís o pequeños trineos colina abajo junto a la muralla. Un
parque de atracciones al aire libre.
12- LOS
PALACIOS
La historia de Ávila se comprende mejor visitando sus
palacios y hay muchos. Están restaurados y siguen siendo piezas arquitectónicas
indispensables. A partir de ahí cada uno ha tenido su historia. Muchos son
edificios renovados que ahora prestan las funciones de hoteles, como los
céntricos Valderrábanos o Los Velada, que fue en el que nosotros nos alojamos.
Obviamente aún conservan una estructura que nos permite imaginar cómo fueron
500 años atrás.
El Palacio de Los Superunda, que contiene obras de
Sorolla, el de Los Verdugo, actual sede del Archivo Municipal y la concejalía
de turismo, el de Los Serrano, que es Centro Cultural, el de Los Águila en
proceso de restauración, el de Los Dávila, el de Los Bracamonte, el de
Polentinos hoy museo del ejército, el de Los Almarza… La nómina es amplísima y
todos ellos son Monumentos Nacionales.
13- LA PLAZA DEL CORRAL DE LAS CAMPANAS
13- LA PLAZA DEL CORRAL DE LAS CAMPANAS
Quizá este no sea el sitio más conocido de Ávila para los
turistas, pero a nosotros nos pareció una plaza con un gran encanto. Por un
lado encontramos el Torreón de los Guzmanes, un edificio histórico declarado
Patrimonio de la Humanidad que actualmente acoge las dependencias de la
Diputación Provincial de Ávila. Tanto el torreón como el patio y diversas salas
pueden visitarse como se especifica en la web de la propia Diputación.
Justo a su lado está el citado Palacio de Los Superunda,
usado como museo y repleto de pinturas de Vasco de la Zarza, entre otros. Un
sitio muy recomendable para pasar una tarde.
14- LAS
PLAZAS INTRAMUROS
Ya hemos hablado de muchas de ellas, pero el recinto
amurallado de Ávila es perfecto para pasear y descubrir nuevos rincones. Hay
decenas de plazas y plazuelas llenas de palacios y flanqueadas por edificios
oficiales. Muchas ofrecen un rato de calma en el ajetreo diario. Ávila es una
sucesión casi infinita de iglesias, monasterios, capillas, ermitas, conventos y
lugares en los que la palabra “historia” cobra otra dimensión.
15- LAS
PLAZAS EXTRAMUROS
Pese a que estamos en una ciudad pequeña ni la historia
ni la vida se acaban al salir de su muralla. La Ávila moderna se extiende y se
ensancha a espaldas del río Adaja, hacia la estación de ferrocarril. Y esa
también es una zona que merece ser vivida. Las proximidades de la muralla
contienen románticas plazas que también cobran vida en muchos momentos del día
como la popular plazuela de Italia. Además de buscar lugares concretos, porque
aquí hay muchos, no dejes pasar la oportunidad de dejarte sorprender por
aquello que no esperas.
16- EL
CHULETÓN DE ÁVILA
Si no es por sus monumentos, que sea por su gastronomía.
En toda Castilla y León hay muchísimo dónde elegir. La chacina y las carnes son
de primera calidad y Ávila es mundialmente conocida por su chuletón, así que si
la grasa lo permite no pierdas la oportunidad de probarlo. Puede que hayas
comido chuletón en muchos sitios, pero ninguno te sabrá como este. Eso es
porque aquí hay una raza autóctona que claramente marca la diferencia. Lo vas a
encontrar en prácticamente todos los restaurantes. Y si lo tuyo es el dulce no
te pierdas las clásicas Yemas de Santa Teresa, un regalo perfecto. Tu paladar
tampoco lamentará una visita a Ávila.
La nuestra fue una experiencia fantástica, la verdad.
Íbamos buscando algo de nieve y una ciudad bonita para pasar unos días y nos
topamos con el mejor de los planes. Esperamos que este post te sea de ayuda y
si quieres planificar aún más tu visita te recomendamos que acudas a la web
turística de la ciudad de Ávila, que está constantemente actualizada y ofrece
un inmenso abanico de posibilidades.
HOTELES Y SITIOS PARA COMER
Por último queríamos dejaros información de dónde nos hospedamos y dónde comimos, muy bien, en Ávila por si os puede orientar. Ya hemos comentado que nos alojamos en el Hotel Palacio de los Veladas. Una muy buena opción por ser céntrico, por un correcto desayuno
y gracias a la temporada baja, por tener un precio muy asequible.
En cuanto a sitios para comer, hay gran variedad de
restaurantes interesantes en la zona, en la que sirven el mismo menú turístico y
por el mismo precio. Nosotros comimos uno de los días en el Restaurante
Siglodoce, al lado del hotel y de la Oficina de Turismo y al día siguiente nos
decidimos por el Restaurante Alcaravea, donde comimos el chuletón que os hemos
mostrado y donde, tras el éxito de la comida, repetimos para cenar.
Aquí os dejamos la web del primero y las opiniones en
Tripadvisor del segundo porque su web no funciona:
Como siempre, nos encantará conocer vuestras opiniones y experiencias a través de comentarios al post o en nuestro twitter @Blogdestina2
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